HUMANIDADES
En las aulas de la única Facultad de Filosofía de Galicia cada vez hay más alumnos. Las matrículas en este grado no han dejado de crecer en los últimos ocho años en la Universidade de Santiago de Compostela: en el 2016 había 175 alumnos inscritos y el curso pasado ya eran 266. Para el decano de la facultad, Xavier de Donato, este incremento se debe a un cambio en el paradigma social que afecta a las preocupaciones de los más jóvenes: «Coa situación actual adquiren unha certa conciencia social, política e ética», asegura. Los alumnos también apuntan al acercamiento de esta disciplina gracias precisamente a las redes sociales, ya sea con reseñas de libros o con series como Merlí. También está por medir el impacto que han tenido en ese repunte de la matrícula los problemas éticos que plantean el desarrollo de las nuevas tecnologías y la inteligencia artificial.
De lo general a lo particular
En el aula, los estudiantes que escojan este grado se encontrarán módulos genéricos, como Historia de la Filosofía, Metafísica, Lógica y Retórica o Estética; y otros más específicos, vinculados a la ciencia, al lenguaje, a la mente o a la política.
Las salidas profesionales pasan por la docencia, la investigación y las oposiciones; pero también pueden tener un perfil más contemporáneo, como la gestión cívica (de entidades, fundaciones y oenegés), la editorial y cultural o el asesoramiento y consultoría en bioética, responsabilidad social y cívica corporativa, convivencia intercultural o mediación social. La UNED también la ofrece en su modalidad a distancia.